viernes, 8 de abril de 2011

Hoy por mí.....

Un lunes, con pocas horas de sueño y mucho estrés, después de devolver unos libros a la biblioteca me dispongo a ir a mi casa para llevar una entrega importante. Al momento de pasar mi tarjeta preferencial de pre-pago por el aparato de la estación este marca SALDO INSUFICIENTE... y yo sin un peso en la bolsa.

- Señor ¿Tiene un peso que me regale para completar para mi camión?....- le pregunto a una persona mayor lejos de la estación.

Me mira  de reojo por arriba del hombro con una cara que bien podría estar pensando "¿por qué me tengo que topar con esta gentuza todos los días?" y sin dirigirme la vista se revisa el bolsillo y en ademán despectivo suelta una moneda casi aventándola.  

¿Les mencioné que soy de apariencia anodina y descuidada?. "Ahí tienes para tus drogas" describiría la acción del señor.

- Señor ¿Tien... - No, no traigo nada...  -.......e un peso que me regale para completar para mi camión?
Ni he acabado de empezar la oración cuando ya me dijo que no.

Vuelvo a pasar la tarjeta. SALDO INSUFICIENTE. Veo si hay alguien adentro a quien le pueda pedir. Nada. Voy hacia la calle a buscar a quién. Ya con cara de desesperación veo que una señora dentro de la estación hace señas. Me señalo estúpidamente con el dedo. 

-¿Yo? - pregunto de manera idiota, como si pudiera oírme de tan lejos. Volteo hacia atrás y hacia adelante por si le hablase a alguien más. Me acerco. - Pruebe con esta - "YA VÁLIDO" dice el odioso aparato al mismo tiempo que emite un sonido horrendo. -...a ver esta...- y lo acepta. Estoy dentro.

La tarjeta normal cuesta el doble de la preferencial (sin tarjeta cuesta 8 pesos) , y por haberla usado dos veces (una con su hija y otra con  el "YA VÁLIDO" que me tocó) se la pudieron haber quitado. Eso no le importo, ni que le saliera mas caro, ni mi apariencia, ni quién carajos era yo.

Le di las gracias no se cuantas veces. -A mi me ha pasado - Le vuelvo a agradecer - ¿Cómo se lo puedo pagar?- le digo mientras me busco no se qué nerviosamente en las bolsas - Hoy por ti, mañana por mi...-  Tantas veces he escuchado esa frase, pero ninguna tan sincera como esa vez. Mucha gente lo dice solo por conveniencia, por eso del famoso "banco de favores" (no digo que no sea útil pero me repugna...) y pensando "ya me lo pagarás con intereses". Tan bonito que suena cuando es sincero....

No traía nada encima y no se me ocurrió darle el collar que me regalo una amiga o un llavero de lego que me regalaron en mi cumpleaños (ambos objetos muy preciados por mi). Lo hubiera hecho.

Le pregunté su nombre. Nuevamente le dí las gracias y me despedí de ella y de su hija. Pasó mi camión. No se me va a olvidar que el 04 de Abril de 2011 justo a las 12:00 pm una señora de nombre Claudia diluyó mi odio por la raza humana. ¿Valgo yo el sacrificio? ¿Realmente lo merezco? 





3 comentarios:

Unknown dijo...

Eaa Muy buen Post y muy cierto a su vez, cuantas veces no somos victimas de la "critica" sin antes dar lugar a a que nos critiquen, desgraciadamente vivimos en un mundo pre juicioso que como te ven te tratan, mas sin embargo hay tienes la prueba que aun queda gente con entrañas en este cada vez mas pisoteado mundo!

Mora dijo...

Es útil hasta cierto punto el "como te ven te tratan", puedes usarlo a tu favor, sin embargo, es algo vil manejarse únicamente por este medio y dejar de lado lo más trascendente, que no es la apariencia.

Mauricio Solis dijo...

Así es, esa es la parte difícil, aprender a realmente usar los ojos, y ver mas allá de telas o joyerías.

Publicar un comentario